La verdad no creía que Dios me quisiera usar con los niños, pero al convivir con niños triquis fueron momentos inolvidables. Gracias Inmersión, LAMM ya todos los que participaron.

Esperaba que Dios me dijera cual era la dirección que debía tomar en mi vida.

Después de ver los videos sobre las condiciones de vida de los diferentes países musulmanes y después de comprender qué es “Tomar mi cruz y seguir a Jesús!; después de lo que Dios me ha hablado en este tiempo, ya sé cual es esa dirección: “Conocer la magnitud de la necesidad de los pueblos musulmanes”; “Morir a mí misma”; “Dejarlo todo por Cristo Jesús”.

Inmersión me ha ayudado a madurar espiritualmente. He establecido aún mejor mi identidad como Hija del Rey, entendiendo la importancia de vivir en todos los aspectos conforme a la voluntad de Dios.

Después de “Inmersión” tengo una visión más clara de las misiones.

Esta experiencia, me hizo darme cuenta de lo importante que es el apoyo de la familia, la iglesia y los amigos; y me ayudó a confirmar lo que Dios ya había hablado a mi corazón. ¡Una experiencia muy recomendable para aquellos que quieren asegurarse si Dios los ha llamado en esta carrera!

Sentí que Dios me dijo: ¿segura que quieres esto?, ¿te atreverías?

Y yo dije: ¡si!

Ver la necesidadVer la necesidad el evangelio, de una traducción, es algo que en verdad conmueve mi corazón. Y al saber gente en el mundo está igual, no se me hace correcto quedarme con los brazos cruzados. Mi llamado es Egipto Norte de África, y ¿sabes? Sólo será un pequeño instrumento en las manos de Dios quién en las cosas más pequeñas, hará cosas grandes; y esforzarme por ser mejor en las manos de Dios.

Hay millas de palabras que me vienen a la mente para describir mi experiencia en Inmersión, fue perfecta, divertida, retada y muy estresante, pero sobre todo fue Dios preparándonos y moldeándonos en todo. Pude palpar su ayuda en cada reto. Estoy muy agradecida con Dios porque solo por Él pude estar en esta experiencia que cambió mi vida por completo.

No me arrepiento de haber dejado mi familia, iglesia, trabajo, carrera por lo que Dios ha puesto en mi corazón, el venir aquí ha sido una experiencia maravillosa y desafiante, le agradezco a Dios por que en todo tiempo hablo a mi vida Él me sostiene. Me guía ya la vez me prepara para lo que viene. Conocí a gente maravillosa en Inmersión fue de mucha bendición.

Lo que Dios me mostró experimentar y vivir en inmersión es algo que yo recomendaría a todo el pueblo cristiano. Te abre los ojos a lo que Dios realmente quiere de su iglesia, no a quedarse pasivo, sino a llevar el mensaje a todo el mundo, dejar tu comodidad y vivir una vida de fe al servicio del Señor.

“Con tremendas cosas nos responderás Tú, en justicia”.

Alguien me dijo “no sé como, pero en sumergido tus miedos te confrontan” y así fue. Durante este tiempo en Oaxaca, Dios me sacudió de todo lo que a él le estorba para limpiarme, y así sumergir fuera el “trampolín” para el siguiente paso. Experimenté de todo, fe, carácter, comidas distintas, algunas experiencias fueron gratas, otras no tanto. Pero no me queda ninguna duda de que Dios me dirigió todo de acuerdo a su plan eterno. Mis expectativas fueron cumplidas, mi fe retada, mi pasión por el llamado aumentada, mi deseo de servir a Dios fue alimentado. Me sentí apoyada en mi mundo. Y mi panorama se afianza.

En inmersión aprenderé a depender de Dios, a conocerlo más. En mi ciudad dependo de Dios pero estoy con mi familia, en el trabajo, en mi iglesia y llegar a Inmersión fue enfrentar algo desconocido, conocer a gente nueva, ver la necesidad que hay en mi nación por la palabra de Dios, pido a Dios que siga revelando su plan a mi vida y que yo pueda cumplirlo.